En horas de la tarde de este jueves, los precandidatos a diputados nacionales, Ricardo Garramuño y Analía Casal, encabezaron el acto de cierre de campaña en la sede de la UCR, de calle Elcano.
Del acto participó el senador nacional Pablo Blanco y gran cantidad de afiliados y correligionarios y referentes del partido centenario quienes se manifestaron optimistas por el resultado que se espera para el domingo 12.
En la oportunidad, ambos precandidatos pudieron tomar contacto nuevamente con los afiliados en un clima de camaradería.
Ante un salón colmado, fue Analía Casal quien abrió la ronda de discursos y, como primera media, agradeció a cada uno de los integrantes de la UCR “por el acompañamiento y por haber abierto las puertas del Comité como también lo hicieron muchos de los fueguinos quienes nos abrieron las puertas de sus casas, nos escucharon y nos brindaron su acompañamiento”. Tuvo un párrafo aparte para la Juventud Radical a quienes les dejó un mensaje de esperanza al señalar que “el trabajo que se llevará adelante será para que el futuro vuelva a tener esperanzas”.
En tanto, y al hablarle a los afiliados, Ricardo Garramuño recordó que desde que surgió la idea de participar de las elecciones, el tiempo pasó muy rápido. “Hace un mes y 8 días que estamos trabajando en esta campaña corta e intensa y les agradezco a la gente de Río Grande por habernos abierto las puertas y sus corazones.
Hizo hincapié en varios de los episodios que fueron protagonizados por integrantes del gobierno de Nación que fueron reprochables en todo sentido y explicó que es uno de los motivos que lo impulsó a participar de una elección de nivel nacional “si están jugando con nuestro futuro”
Creo que lo normal y lo que tenemos que hacer los que tenemos responsabilidades políticas es tomar cartas en el asunto porque a estas violaciones hay que corregirlas”, y es por “esas coas que tenemos que participar de estas elecciones, para cambiar esas cosas”.
Finalmente, Garramuño, agradeció a Pablo Blanco y a cada uno de los que integran la UCR por haberlo recibido “y a cada uno de los vecinos que aceptaron a mantener una charla por tanto cariño recibido”.
